Al hombre, vecino de la parroquia de Parada, le picó un insecto autóctono, a cuyo veneno era alérgico como los otros dos fallecidos.
Un hombre de 65 años, vecino de la parroquia de Parada, en el municipio ourensano de San Cristovo de Cea, falleció en la tarde del pasado sábado por la reacción a la picadura de una avispa, insecto al que era alérgico. Es la tercera persona que fallece en Galicia desde el pasado día 14 por picaduras de avispa, uno de ellos por la especie velutina, la invasora asiática, y los otros dos por insectos autóctonos. Los tres fallecidos eran alérgicos al veneno de estos insectos.
El suceso tuvo lugar a las 18.00 de este sábado. El fallecido se encontraba trabajando en una huerta situada en las inmediaciones de su casa, en Parada. Tras notar la picadura del insecto, al que era alérgico, el hombre acudió al interior de la casa, donde su mujer le aplicó una inyección de adrenalina, informa la agencia Europa Press.
Urxencias Sanitarias 061 movilizó una ambulancia y el helicóptero medicalizado, que se desplazaron al punto. Sin embargo, los efectivos sanitarios no pudieron hacer nada por la vida del hombre, que falleció en el lugar. El fallecido, Manuel F. P., un conductor de autobuses a punto de jubilarse, ya había tenido con anterioridad reacciones alérgicas al veneno de los insectos, según El Faro de Vigo.
Se trata de la tercera víctima mortal por picadura de avispa en una semana. El primer caso se produjo en Viveiro el pasado día 14 a consecuencia de la picadura de una avispa autóctona. Días más tarde, un vecino de O Porriño falleció cuando realizaba tareas de limpieza en una finca. El hombre fue atacado por avispas velutinas. Todos ellos eran alérgicos a las picaduras de avispa.
La avispa asiática (Vespa velutina), responsable según los expertos del 90% de los picotazos por insectos que se producen en las áreas donde habita, puede producir la muerte a personas alérgicas o, en caso de ataque masivo, a aquellas que no lo son y cuya salud es precaria.
Marcos Negrete, expresidente de la Asociación Española de Apicultores (AEA), ha explicado a Efe que «el año pasado, de cada cien nidos resultaban atacadas unas 15 personas y este año uno de cada dos nidos que retiro es porque las avispas han picado a alguien», informa la agencia Efe.
«No es que sean más agresivas, sino que los nidos son más pequeños y están más escondidos», ha asegurado este experto, que el año pasado retiró hasta 200 avisperos en una ciudad de 50.000 habitantes.
Este año, sin embargo, recibe desde que comenzó la temporada —hace 15 días— entre uno y tres avisos diarios y solo ha retirado de 30 a 40 nidos; «la primavera ha sido bastante mala y ha retrasado casi dos meses la aparición de las avispas».
Fuente: elpais.com